La Dieta y el Colesterol

La mitad de la población mundial lucha con esta condición: el colesterol alto.

Nuestros antepasados se alimentaban la mayor parte de su vida de frutas, hierbas, frutos secos, hojas, raíces, agua, semillas, cereales y carne producto de la caza, que era a menudo una tarea de enormes proporciones.

Hoy en día, a diferencia de nuestros antepasados, no luchamos o corremos más por nuestra comida, o trabajamos la tierra en busca de raíces. Lo que nos hace débiles.

En lugar de eso, nos encontramos con el colesterol en abundancia. Alimentos tales como las galletas, pasteles, bebidas gaseosas, productos químicos, pesticidas, chocolates, bebidas de dieta, conservadores artificiales, y la lista podría continuar.

Muchas personas tienen niveles de colesterol que están por las nubes. Esta condición no es más que un síntoma de un desequilibrio fundamental y peligroso dentro de su cuerpo, y el colesterol es simplemente la forma inicial en que se manifiesta.

La mayor influencia en el nivel de colesterol en la sangre es la mezcla de grasas en la dieta.

Aunque nuestro hígado produce 75% de colesterol, sólo el 25% se absorbe de la comida. Las grasas son de diferentes tipos para una condición de colesterol alto. Algunas grasas son buenas para mantener los niveles de colesterol bajos, mientras que otras son obviamente malas.

Las grasas malas son las grasas saturadas e hidrogenadas (o grasas trans). Las grasas malas aumentan el riesgo de ciertas enfermedades.

Mientras que las grasas buenas, es decir, las grasas monoinsaturadas y poliinsaturadas, disminuyen el riesgo de enfermedades.

La clave es sustituir las grasas buenas para las grasas malas.

Su cuerpo - un caldo de cultivo.

Una amplia investigación revela que la proliferación de colesterol en la sociedad es una manifestación directa de nuestro estilo de vida cambiante.

El cuerpo está infectado por los ácidos: liberados de los azúcares, carbohidratos, exceso de grasa y ácido úrico, encontrados en una gran cantidad de alimentos de hoy en día.

Reducción de Colesterol: Recomendaciones para la ingesta de grasas.

Aunque los diferentes tipos de grasa tienen una gran variedad de efectos sobre la salud y la enfermedad, el mensaje es simple: deshacerse de las grasas malas y sustituirlas por grasas buenas.

Centrarse en la causa principal del problema del colesterol... elegir frutas y verduras que impulsen los ácidos fuera de su cuerpo y quemen el exceso de colesterol.

Cambiar Los Malos Hábitos Ayudará Enormemente a Tu Dieta

A medida que avanzamos en la edad adulta, cambian nuestras prioridades, y de alguna manera desaparece la necesidad de hacer deporte y el trabajo se vuelve más importante. Las actividades sociales, fiestas y las bebidas alcohólicas perjudican nuestra salud y nuestro objetivo de bajar de peso.

Con el tiempo desarrollamos el gusto por comida poco saludable, como la comida chatarra, hamburguesas, papas fritas y toda esa comida que no nos ayuda para nada con nuestra dieta.

Alrededor de nuestros 30 y 40, notamos un considerable aumento en la cantidad de grasa corporal y con ello los problemas de salud asociados con este estilo de vida.

Los malos hábitos se vuelven un problema para el control de nuestro peso. La acumulación de todos estos pequeños hábitos poco saludables a lo largo de nuestra vida, es lo que nos convierte en lo que somos.

La buena noticia es que tú puedes cambiarlos, y lograr mejoras constantes a tu estilo de vida a través de múltiples áreas. Lo más importante es darte cuenta de que, si bien es posible que no veas resultados inmediatos en tu estilo de vida, la combinación de pequeñas mejoras hará un gran cambio en tu cuerpo y en tu salud en el mediano plazo.

He aquí cómo empezar a cambiar los malos hábitos por buenos hábitos:

1. Mantente activo – Esto ayuda a quemar un poco de grasa corporal y a fortalecer tu corazón. Un punto de partida podría ser caminar. Comienza con un paseo ligero y luego intenta caminar cada vez mayores distancias y durante más tiempo cada vez.

2. Come saludable – Sustituye los alimentos con altos contenidos de grasas y azúcar por alternativas más saludables. Empieza con tal vez una comida al día y progresa a partir de ahí. Después de un tiempo te acostumbrarás a la comida sana y harás mejores elecciones de tus alimentos.

3. Come comidas más pequeñas – Es mejor tener 5 o 6 comidas pequeñas que 3 comidas abundantes. Trata de reducir el tamaño de las porciones. Comer de esta manera te mantiene lleno por más tiempo.

4. Elimina las bebidas azucaradas – Elimina las bebidas gaseosas de tu dieta, estas causan estragos con tus niveles de azúcar, añaden grasa corporal, e interfieren con el sistema hormonal.

5. Reduce el consumo de alcohol – El alcohol tiene los mismos efectos que las bebidas gaseosas en tu cuerpo. Trata de reducir su consumo al mínimo.

6. Bebe mucha agua – El agua ayuda a eliminar todos los subproductos del cuerpo y es necesaria para limpiar tu cuerpo de los residuos asociados con la pérdida de peso. También te ayudará a dar esa sensación de saciedad. Hay una forma fácil de beber suficiente agua cada día: bebe un vaso de agua antes y uno después de cada comida.

7. Duerme bien – La falta de sueño hace que tengas sobrepeso. La falta de sueño tiene un efecto negativo en el sistema hormonal del cuerpo, entre otras cosas.

8. Come más lento – Debido a nuestro estilo de vida, la mayoría de la gente tiene la costumbre de comer demasiado rápido. Esto provoca una mala digestión y nos lleva a comer en exceso. Comer más lento y saborear tu comida hará que te sientas más lleno con una menor cantidad de comida.

El efecto combinado de hacer todas estas mejoras graduales en varias zonas de tu vida, serán de mucha ayuda con tus problemas de sobrepeso.

Cinco Consejos Efectivos Que te Ayudarán a Rebajar de Peso más Rápido

Es muy común culpar a las dietas para rebajar cuando estas no funcionan, pero en la mayoría de los casos se debe principalmente a nuestros hábitos alimenticios y estilo de vida.

Aquí te presento cinco consejos efectivos que ayudarán a que tu dieta funcione:

Consejo # 1: Bebe un vaso de agua 20 minutos antes de cada comida. El verdadero truco está en dar a su cuerpo toda el agua que necesita. La recomendación es beber al menos 8 vasos de agua al día. Pero tiene que ser AGUA, no bebidas alcohólicas, ni jugos, ni café. Sólo agua pura.

Además de que tu cuerpo necesita agua para mantener todos sus sistemas y eliminar los residuos las impurezas, también te ayudará a comer menos, ya que te sentirás un poco más llena. Cuando no tomas suficiente agua, tu cuerpo tratará de conservarla mediante la retención de agua en los tejidos musculares y tejidos grasos. Su cuerpo necesita agua, como una planta la necesita para sobrevivir.

Consejo # 2: Come frutas y verduras crudas en lugar de en conserva. Aparte de que las frutas y verduras crudas son más nutritivas, en muchos casos, en realidad estás recibiendo menos calorías cuando usted las come. Las frutas y vegetales en conserva, por el contrario, tienen más calorías debido a que se les han agregado conservadores y saborizantes artificiales.

El cuerpo trabaja más duro para digerir las frutas y verduras crudas, y eso significa que se utilizará más calorías para conseguir todos los nutrientes ellos. Además su cuerpo necesita la fibra adicional presente en las frutas y verduras que no han sido cocinados y procesados ​​para que siga funcionando bien.

Consejo # 3: Come una dieta equilibrada. Es obvio que es más saludable pero, ¿te ayudará rebajar de peso? La respuesta es que sí, y aquí está el porqué. Cuando tu cuerpo carece de cualquier nutriente, tratará de compensar la diferencia sustituyéndolo por otro nutrientes. Debido a esto, sentirás que tienes hambre, cuando en realidad lo que tu cuerpo realmente tiene, es la carencia de un nutriente en particular.

Por eso, comer una dieta equilibrada proporcionará todos los nutrientes que tu cuerpo necesita, en las proporciones adecuadas.

Consejo # 4: Hacer media hora de ejercicio moderado cinco veces a la semana. Tu cuerpo utiliza los alimentos que consumes para producir energía a fin de realizar tus actividades diarias. Cuanta más energía utilices, más va a utilizar tu cuerpo la comida que ingeriste para producirla. Cuando comes menos calorías de las que tu cuerpo necesita, utilizará las reservas almacenadas para mantenerlo en marcha.

Incluye media hora de ejercicio moderado a tu rutina diaria cinco veces a la semana. Esto aumentará el consumo de energía de tu cuerpo. Pero hay más. Todo el tiempo tu cuerpo utiliza calorías, incluso cuando no estás haciendo nada. Se necesita energía para mantener las funciones de tu cuerpo. Pero se utilizan más calorías para  mantener los músculos que para mantener la grasa. Hacer ejercicio ayudará a tu cuerpo a convertir la grasa en músculo, lo que aumenta tu tasa metabólica.

Consejo # 5: Comer entre comidas. Originalmente nuestros cuerpos no fueron diseñados para utilizar el horario de comer 3 veces al día, el cual hemos adoptado más por necesidad que por que esto sea bueno para nuestros cuerpos.

Tu cuerpo necesita energía todo el tiempo. Por eso, en lugar de comer todas tus calorías sólo en tres sesiones, es mejor repartirlas en 5 o 6. El truco es comer comidas más pequeñas – en lugar de 3 comidas abundantes. Esto ayuda a mantener tu sistema digestivo ocupado, y la necesidad de energía al máximo durante todo el día.

Adopta estos consejos a tu estilo de vida diaria, y verás como tu dieta será más efectiva en su tarea.

Rebajar De Peso Rápido Cambiando Tu Dieta

Una de las cosas más importantes que hay que hacer cuando uno está tratando de ponerse en forma, es tratar de ser precavido con nuestra dieta. Esto no es algo complicado de hacer, y te sentirás mucho más saludable cuando comas los alimentos adecuados en la cantidad adecuada.

Una de las mejores maneras de cambiar tu dieta es tratar de que sea más orgánica. Algo muy bueno de hacer, es incrementar la fibra en tu dieta, lo que contribuye a limpiar el colon de todos los inhibidores negativos para rebajar de peso. Esto significa que en lugar de comer alimentos refinados o procesados, debes comer alimentos integrales, como el arroz integral y el pan integral. Estos alimentos tienen más fibra con menos grasas malas, como las grasas trans y colesterol.

También debes aumentar tu aporte de proteínas, minerales y vitaminas. Para ello es bueno comer más frutas y verduras, tratar de sustituir la carne roja por pescado y pollo. La carne del pescado y del pollo tienen menos calorías y grasa, y proporcionan más proteína.

Una de las partes más importantes al cambiar tu dieta, es reducir al mínimo la comida chatarra. Estos incluyen los dulces, papas fritas, palomitas, helados, batidos de leche y refrescos. Puedes sustituirlos por frutas y bocadillos de vegetales. En lugar de refrescos, puedes beber agua o diluir jugo natural con agua para darle sabor. Verás que esto hace una gran diferencia en el nivel de azúcar y en tu ingesta de grasas.

Al cambiar tu dieta te sentirás más saludable y con más energía. Al principio puede ser que te sientas un poco diferente debido a la fibra extra y por el cambio en tus alimentos, pero esto sólo va a ser temporal, con el tiempo tu cuerpo va a trabajar mejor y más eficientemente. Tendrás más energía y te sentirse como una persona completamente nueva.

Mantenerse en forma no sólo depende de hacer ejercicio, la dieta también juega un papel importante en tu salud. Recuerda que el cuidado de tu salud y mantenerte en forma es una buena inversión en uno mismo y algo que no se debe descuidar, o de lo contrario, un día te arrepentirás por tus malos hábitos de hoy.

La dieta es una manera de mantenerse en forma, y cuando se hace de forma correcta, pude formar parte de tu estilo de vida. Una vez que se convierte en un buen hábito, verás reflejados los beneficios en tu salud.

Al aplicar estos pequeños cambios a tu dieta para rebajar, y hacerlos parte de tu estilo de vida, podrás bajar de peso de forma saludable y permanente.

Si te interesa conocer un poco más sobre cómo bajar de peso de forma permanente, puedes darle un vistazo a estos otros artículos que escribí haciendo clic aquí.

¿Por Qué La Mayoría De Las Dietas Para Rebajar No Funcionan?

¿Ha seguido todas esas dietas para rebajar que te recomendaron? ¿Has rebajado de peso en el pasado sólo para ver como lo recuperas un poco más tarde? Esto es muy común y se presenta con mucha frecuencia.

El dilema es que todas esas dietas funcionan, y al mismo tiempo, ninguna de ellas funciona. Lo que quiero decir, es que es posible que bajes de peso, pero lo que sí es muy probable es que no puedas mantenerlo. 

¿Pero por qué?

Esto se debe en la mayoría de los casos, a que una vez que terminas la dieta, regresas a tu rutina regular; la misma rutina que te llevo a subir de peso en el primer lugar.

Por lo regular estas dietas son, en su mayoría, dietas restrictivas. Lo que quiere decir que, para que puedas lograr tu meta literalmente tienes que matarte de hambre. Pero, ¿quién puede aguantar este ritmo de alimentación sin que su salud se vea afectada? Nadie.

Es por eso que no se pueden seguir por largo tiempo; por lo general sólo por unos meses, e incluso algunas otras sólo apenas unas pocas semanas. Esta es la razón principal por la que estas dietas de moda no están funcionando.

El objetivo es ser capaz de bajar de peso, pero a la vez de una forma saludable y permanente. Se hace indispensable entonces, encontrar dietas para rebajar que tengan un buen balance entre, elegir los alimentos que prefieres con alimentos saludables para tener una mejor oportunidad de éxito perdiendo esas libras de una forma duradera. 

Pequeños Cambios: Gran respuesta a la pelea por la pérdida de peso

Comienza hoy mismo, pero haz uno o dos pequeños cambios un día a la vez, como por ejemplo, cambiando los refrescos por agua (si los bebes ahora, por supuesto). Los cambios no tienen que ser drásticos. De hecho, tratar de hacer cambios drásticos en tu estilo de vida es una fórmula para el fracaso, nunca funciona.

La pérdida de peso se reduce a elecciones

La mayoría de las personas que han rebajado de peso y lo mantuvieron te pueden decir que rebajar de peso es un estilo de vida. Se trata de las decisiones que tomas cada día. ¿Elijes comerte una ración extra de carne a pesar de que ya estás satisfecha? ¿Eres de las que tienen una bolsa de dulces o galletitas en el cajón del escritorio?

¿Decides comerte una bolsa de papas fritas? Cambia ése comportamiento y te encontrarás en el camino de lograrlo. Cambia estas decisiones y ya estarás un paso más cerca de tu meta, sin mencionar el dinero que te ahorras.

En resumen, elije una dieta para rebajar que no te mate de hambre, que tenga un balance adecuado en la alimentación para que te permita hacerla parte de tu estilo de vida sin que tenga que ser una carga para ti y puedas perder libras de una forma agradable y duradera. Te recomiendo visites un blog en donde hablo más sobre cómo bajar de peso en poco tiempo con un sistema que combina todo esto.

Por ahora me despido. No dejes de seguirme, porque seguiré dándote tips sobre este tema.