A medida que avanzamos en la edad adulta, cambian nuestras prioridades, y de alguna manera desaparece la necesidad de hacer deporte y el trabajo se vuelve más importante. Las actividades sociales, fiestas y las bebidas alcohólicas perjudican nuestra salud y nuestro objetivo de bajar de peso.
Con el tiempo desarrollamos el gusto por comida poco saludable, como la comida chatarra, hamburguesas, papas fritas y toda esa comida que no nos ayuda para nada con nuestra dieta.
Alrededor de nuestros 30 y 40, notamos un considerable aumento en la cantidad de grasa corporal y con ello los problemas de salud asociados con este estilo de vida.
Los malos hábitos se vuelven un problema para el control de nuestro peso. La acumulación de todos estos pequeños hábitos poco saludables a lo largo de nuestra vida, es lo que nos convierte en lo que somos.
La buena noticia es que tú puedes cambiarlos, y lograr mejoras constantes a tu estilo de vida a través de múltiples áreas. Lo más importante es darte cuenta de que, si bien es posible que no veas resultados inmediatos en tu estilo de vida, la combinación de pequeñas mejoras hará un gran cambio en tu cuerpo y en tu salud en el mediano plazo.
He aquí cómo empezar a cambiar los malos hábitos por buenos hábitos:
1. Mantente activo – Esto ayuda a quemar un poco de grasa corporal y a fortalecer tu corazón. Un punto de partida podría ser caminar. Comienza con un paseo ligero y luego intenta caminar cada vez mayores distancias y durante más tiempo cada vez.
2. Come saludable – Sustituye los alimentos con altos contenidos de grasas y azúcar por alternativas más saludables. Empieza con tal vez una comida al día y progresa a partir de ahí. Después de un tiempo te acostumbrarás a la comida sana y harás mejores elecciones de tus alimentos.
3. Come comidas más pequeñas – Es mejor tener 5 o 6 comidas pequeñas que 3 comidas abundantes. Trata de reducir el tamaño de las porciones. Comer de esta manera te mantiene lleno por más tiempo.
4. Elimina las bebidas azucaradas – Elimina las bebidas gaseosas de tu dieta, estas causan estragos con tus niveles de azúcar, añaden grasa corporal, e interfieren con el sistema hormonal.
5. Reduce el consumo de alcohol – El alcohol tiene los mismos efectos que las bebidas gaseosas en tu cuerpo. Trata de reducir su consumo al mínimo.
6. Bebe mucha agua – El agua ayuda a eliminar todos los subproductos del cuerpo y es necesaria para limpiar tu cuerpo de los residuos asociados con la pérdida de peso. También te ayudará a dar esa sensación de saciedad. Hay una forma fácil de beber suficiente agua cada día: bebe un vaso de agua antes y uno después de cada comida.
7. Duerme bien – La falta de sueño hace que tengas sobrepeso. La falta de sueño tiene un efecto negativo en el sistema hormonal del cuerpo, entre otras cosas.
8. Come más lento – Debido a nuestro estilo de vida, la mayoría de la gente tiene la costumbre de comer demasiado rápido. Esto provoca una mala digestión y nos lleva a comer en exceso. Comer más lento y saborear tu comida hará que te sientas más lleno con una menor cantidad de comida.
El efecto combinado de hacer todas estas mejoras graduales en varias zonas de tu vida, serán de mucha ayuda con tus problemas de sobrepeso.
